LA MANCHA SIN FIN, TIERRA DE DON QUIJOTE (19/09/2021)

“La libertad es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y se debe aventurar la vida”

Don Quijote de la Mancha

Dejamos la serranía de Cuenca, y el paisaje va cambiando, de sierra  cubierta de pinos a la llanura ondulada con tierra colores terracota y verde brillante adornada con cientos de encinas. Entramos en tierras de Don Quijote.

Nuestro primer destino es Belmonte, conocida por su magnífico castillo y por ser cuna de Fray Luis de León.                                                                              Llevamos días organizando nuestro calendario “laboral”. Vamos llamando a los ayuntamientos de los pueblos por donde pensamos pasar, para que nos permitan poner un puesto para vender nuestro libro y merchandaisin, pero no está resultando sencillo, en algunos nos piden hasta un plan de contingencia frente al covid; además debemos hacer una solicitud por la sede electrónica, y no hay manera, por lo que recurrimos al e-mail, pero no siempre tenemos respuesta. Sin embargo, pueblos como Mota del Cuervo, en cuanto les llamamos, nos abren la puerta y sin burocracia. ¡Muchas gracias!

Justo de camino a Belmonte, nos llaman del ayuntamiento para decirnos que tenemos permiso.

  • ¡Bien! Gritamos los dos.

La chica que nos contacta nos dice que nos pongamos donde queramos: pues perfecto.

Llegamos a Belmonte sobre las cinco y media de la tarde, con un calor como de pleno agosto y no hay un alma en la calle. En breve, aparece un alma solitaria, Antonio, un vecino del poblado que anda buscando un bar para tomarse un café y que lleva un mosqueo tremendo porque no hay nada abierto. Pues si lo llegamos a saber, montamos nuestro bar rodante jajaja.

Nos dice que el pueblo está muerto que no hay nadie… ¡pues vaya plan si queremos montar el puesto! Decidimos dirigirnos al castillo, la principal atracción del pueblo, pero cuando llegamos ya están cerrando, eso sí, el lugar es una maravilla para pasar la noche, y el atardecer desde lo alto de colina, nos ofrece una vistas preciosas.

              

Por la mañana, decidimos que mejor que el pueblo, la puerta del castillo puede ser un buen lugar de venta, sobre las diez, llegan Mara y Trini, las chicas encargadas y enseguida nos reconocen.

  • Pero si vosotros sois lo de la tele- nos dice Mara.
  • Sí, le respondemos y nos ponemos de casquera.

Nos dicen que no hay ningún problema en ponernos en la puerta, incluso nos etiquetan en la redes sociales, da gusto encontrar gente así. La mañana no se da nada mal en cuestión de venta, y hasta nos invitan a tomar unas cañas, por lo que decidimos quedarnos, visitar el castillo y poner el puesto el sábado que parece ser hay más afluencia de gente.

               

El Castillo de Belmonte con sus muros intactos es una impresionante fortaleza construida por orden de Don Juan Pacheco, Marqués de Villena y siglos más tarde fue residencia de Napoleón III y su Esposa Maria Eugenia de Montijo. Se cuenta que Juana la Beltraneja pudo estar allí retenida por Don Juan, que apoyaba  a esta como sucesora de la corona de Castilla en lugar de a Isabel la Católica. Visita más que enriquecedora históricamente hablando.

Después de esta grata visita, paseamos por el pueblo que parece estar un poco más animado y vamos en busca de la iglesia, la misión es ver la pila bautismal de Sor María de la Cruz, hermana clarisa que llegó a Hellín y allí protagonizó diversos milagros, de hecho el día de la Cruz 3 de Mayo, se celebra en su memoria. Mi tía hermana Clarisa de Hellín, nos contó la historia y nos hace especial ilusión el verlo y poder contárselo. https://www.hellin.es/index.php/dia-de-la-cruz

Son la ocho de la tarde y justo aparece un chico por la calle, al que le pregunto, y me responde riendo.

  • Has tenido suerte porque soy el cura del pueblo.
  • Pues, si, mucha…-le respondo.

Nos manda a la colegiata rápido, porque cierran justo ahora. A la llegada, otro chico está cerrando los magníficos portones de esta grandiosa iglesia, le contamos la historia y nos permite pasar a visitarla además de contarnos que también y mucho antes, fue la pila donde se bautizó a Fray Luis de León.

Ya está cayendo el sol, y la luna casi llena aparece sobre una de las almenas del Castillo, magnífica imagen para terminar el día.

Por la mañana, montamos el puesto y la afluencia de gente es tremenda, casi todo el mundo para conversar y apoyarnos en nuestro viaje, la mayoría nos han visto por la tele, pasamos un día divertidísimo y parece que el negocio funciona.

Después de una buena siesta, nos dirigimos a Mota del Cuervo, donde en el ayuntamiento nos dieron carta blanca para ponernos donde quisiéramos, así que decidimos colocarnos en los maravillosos molinos que vigilan este pueblo desde lo alto de una colina. Montamos el puesto, pero pasamos más bien la tarde haciendo magníficas fotos del lugar que nos deja entusiasmados. Como hay visitantes, dejamos las fotos para atender el negocio, está claro que en La Mancha vamos teniendo suerte.

                       

                        

Por la mañana, se nos acerca un hombre, es Enrique Tirado, el que ha sido presidente de la Asociación de “Amigos de los Molinos”, pasamos un buen rato con él mientras nos deleita con historias de estos molinos. Su abuelo Epiridion Zarco era juez de paz de Mota, y en 1941, Don Ramón Solano Suñer, cuñado de Franco pasó por aquí, quiso regalarle un molino, el único que estaba en pié data del siglo XVI con el fin de que lo mantuviese, ya que era costoso y el resto estaban derruidos, este no aceptó el regalo, pero deicidio comprarlo, y así fue. El resto fueron reconstruidos por financiación de varios países, hay uno que es iraquí, otro francés, otro austriaco… Vamos los molinos de la Naciones Unidas jajaja.

Después de esta y muchas historias más, nos colocamos en la plaza del pueblo, que debido a la vendimia no está muy animada, pero aun así, nuestra camioneta llama la atención y la gente se acerca, no todo el mundo compra pero conseguimos nuestro objetivo diario, y sobre todo tenemos la suerte de probar el magnífico pan de Mota, uno de los mejores panes de España.

                                                           

Salimos casi a las dos de la tarde dirección Campo de Criptana, ya dirección Ciudad Real, dejamos atrás las aspas de estos maravillosos “Gijantes” pero en breve por el horizonte aparecen nuevos, no nos extraña que Don Quijote quisiera luchar contra ellos, con imponentes.

Propongo al ser domingo dar una vuelta al llegar, es tarde y tenemos hambre, pero aprovechamos la hora en la que los visitantes están comiendo para pasear tranquilos por estas maravillosas calles que nos trasladan a la esa Mancha de Sara Montiel, que por cierto es oriunda de esta población de casas blancas y azul intenso.

                  

                   

Hace días, nos contactó Fernando, locutor de Radio Complices en Murcia para comentarnos que quería hacernos una  entrevista. Nos habló de una chica albaceteña que va viajando en bici con su perro hasta Inglaterra, pues a ver si nos la encontramos.

Cuando comienza a caer el sol, y después de una buena siesta, vamos a buscar hueco en el parking de los molinos para pasar la noche, y qué gran sorpresa, Ana, la chica ciclista, está allí, que alegría. Además junto a ella, una caravana de unos galeses majísimos, Manuel y Janet que hacen campamento con unas vistas maravillosas a los molinos. Está cayendo el sol y nos unimos todos para ver este mágico momento con un buen vino de nuestro cuñado y una suculenta cena que prepara Manuel continuamos la tertulia y las risas hasta pasada la media noche. Maravilloso encontrar compañeros viajeros en el camino.

                    

Antes de llegar a nuestros destinos, contactamos con los ayuntamientos y pedimos permiso para instalar nuestro puesto, en el caso de Alcazar de San Juan, no hemos tenido respuesta, con lo que después de despedirnos de nuestros amigos viajeros nos dirigimos a esta ciudad dispuestos a plantarnos en el mercado. Con el trasnoche, de ayer se nos ha pegado un poco el arroz, pero casi mejor, porque ya está todo el mercado montado y sólo hay que buscar un hueco. Y sí, lo encontramos entre un puesto de zapatos y uno de edredones, ahí se colocan los manchegos. Lo curioso, es que a la gente parece que les demos miedo, porque no se acerca ni Dios, tal vez no seamos el puesto habitual, pero se limitan a mirarnos de lejos y en cuanto les saludamos salen corriendo jajaja. La policía pasa un par de veces por delante de nosotros y nos miran extrañados pero ni se acercan, pues mejor. Finalmente, una pareja de mediana edad, viene a hacia nosotros, con una sonrisa de oreja a oreja y nos dicen que nos han visto es la tele, cogen el libro y unas pegatinas y nos desean buena suerte, pues perfecto, por lo menos hemos tenido venta.

Después de un par de horas, decidimos recoger el puesto y buscar una sombra para comer, lo cual es difícil en La Mancha, pero junto al cementerio, hay unos cipreses que nos hacen de sombrilla por unas horas hasta que esperamos a Chema, un chico que conocí hace muchos años en Brighton, estudiando inglés, y con el que pasamos un ratito contándonos anécdotas de nuestras vidas.  

Nuestro próximo destino es una finca llamada Valdivieso y situada al sur, en una aldea llamada Cinco Casas, queremos ver como elaboran queso manchego. Luis el dueño, nos atiende de maravilla y ni que decir sus trabajadores que hasta nos enseñan a voltear los quesos, toda una experiencia, y un queso riquísimo.

                                  

Dejamos esta granja artesana y nos dirigimos a Consuegra, provincia de Toledo, sabemos que son las fiestas y nos frotamos las manos, porque debe haber un gran público para nuestro puesto, el problema es que no tenemos permiso, ni siquiera nos contestaron del ayuntamiento, pero después de la experiencia de Alcazar, decidimos arriesgarnos. Primero echamos un vistazo a la localización y tenemos la suerte de presenciar la procesión del Cristo de la Vera Cruz, muy emotiva.

Instalamos nuestro puesto junto a un negrito que vende un poco de todo, aquí hay mucha gente que se nos acerca porque nos han visto en la tele, pero nadie compra nada, la mayoría de mujeres nos dicen que luego vuelven jajaja, nos lo creemos señoras. De repente vemos acercarse a dos policías de dos metros y musculados, imagino que se nos nota en la cara que estamos ilegales.

  • Señores, ¿Pueden por favor mostrarnos el permiso de ocupación de vía pública? –Nos dicen.
  • ¿Permiso? No tenemos permiso, llamamos al ayuntamiento y cómo vamos dando la vuelta al mundo nos dijeron que nos pusiéramos donde hubiera un hueco, esta es la manera que tenemos de financiarnos. –Les contestamos.
  • ¿Cómo? ¿Qué están dando la vuelta al mundo? ¿Y piensan hacerlo vendiendo esto? –Nos interrogan.
  • Si señores agentes, así es.
  • Pues dudo mucho que estén dando la vuelta al mundo, ya que tendrían que ir en otra dirección. –Nos dice uno de ellos.
  • Señor agente, es cierto, espere, que le voy a enseñar un vídeo del telediario…
  • Bueno, ¿Y cuánto tiempo piensan quedarse?
  • Nada un par de horas y recogemos.
  • Pueden quedarse, pero podríamos hacerles desalojar y multarles…

Puff… ahora nos da la risa…¡jajaja! nos sabíamos que había una dirección concreta para dar la vuelta al mundo….

 Poco después, nuestro vecino africano nos confirma que aquí la gente sólo quiere comer y no compran nada. Pues con la música a otra parte.

Aprovechamos para visitar los molinos y las espectaculares vistas de tierras manchegas sin fin, y nos vamos dirección Toledo que pasado mañana salimos en la tele.